jueves, 21 de abril de 2011

Viva Plomer 1 vs Big Sur 1



 El goleador empedernido













En la tercera fecha de campeonato “Los Amantes del despeje” apenas pudieron rescatar un empate. Su rival de turno resultó ser un discreto oponente que, sin embargo complicó a los nuestros, y de no ser por la reaparición del “goleador de la pista”, Plomer se hubiera ido con las manos vacías. El partido fue de bajo nivel, demasiado luchado en el medio y con pocas situaciones de gol, de manera que de a ratos dio la sensación que los arcos sobraban. Durante la primera mitad “los de azul” parecieron manejar mas prolijamente la pelota, enarbolando la bandera del buen juego que pregona su máximo referente en el medio campo, buscando la salida por izquierda con el experimentado “cone” Navarro, y por derecha con el veloz Neyssen de buena actuación en los 3 partidos disputados. Pero esos arranques en campo propio no encontraban correlato de ¾ para arriba. Transcurridos los primeros 15 minutos el panorama no varió. Pero la salida obligada de Segovia (cláusula “verde” del contrato) se sintió fuerte en los de Plomer, quienes a partir de ese instante perdieron casi por completo la tenencia del balón. Acéfalos en la construcción, Plomer perdió la brújula, y su oponente sin hacer demasiado mérito encontró la ventaja, la cual llegó mediante centro diagonal al área y por la desafortunada salida del nº 1. A 15 del final, y habiendo sido el encuentro de la características ya referidas, la posibilidad del 1 a 1 parecía estar tan lejos como el 1 a 1 de los 90. Sin embargo lo conservador del limitado Big Sur, le brindó a los nuestros la posibilidad de plantar sus líneas mas cerca de la portería ajena. Porque los “sur grande”, luego de adelantarse en el marcador, retrocedieron en el campo, y le devolvieron la iniciativa a Plomer. Y con poco, se consiguió mucho. Y aunque en alguna jugada aislada se pudo haber producido el tanto que definiera el encuentro, la impericia del rival o el acierto de propios, o quizás la fortuna evitaron que ello sucediera y por el contrario en el último minuto de tiempo reglamentario encontró el gol.
 Para destacar el impulso que le imprimió el impetuoso Gastón Mendoza, quien con solvencia, calidad y superioridad física impuso respeto en la línea defensiva, y se quedó por unanimidad con el premio de mejor jugador de la tarde. Acaso el único que le podrá disputar tal galardón será quien se metió en el título de la jornada. Porque con su agónico gol le dio un punto a Plomer, porque hacía rato que no convertía (y se notó en el festejo, ja), porque en el gol generó la chance desde una pelota casi perdida (el centro de Rome se abrió demasiado, y la altura tampoco era la ideal, pero “Polvo” con su “espíritu vacunador” se animó al remate de primera, desde afuera del área, de sobrepique fuerte y recto donde duermen la arañas, le fecundó el arco a los sureños.) Porque está tan enamorado del gol que cuando se halla entre los convocados algún refuerzo de categoría en la delantera, es el primero que ofrece su salida para permitir que el postulante de ocasión tenga desde entrada la chance de comenzar su romance con la conquista. Porque cuando no la mete, la semana se le vuelve eterna, esperando la próxima cita con la portería de enfrente. Porque sufre de modo crónico de ese egoísmo propio del goleador, que cuando lo quebranta buscando un compañero y el resultado no es la red, desea ser deglutido por obra de la madre naturaleza.
Plomer pudo haberlo ganado, casi lo pierde, pero lo empató, y en definitiva esta paridad estuvo cargada de un sabor mas cercano a la victoria, porque de las 3 maneras de terminar igualado en un match, sin dudas que ésta es la mas gustosa. Como corolario, además de lo ya mencionado respecto del debut del “Patrón” Mendoza, no quiero dejar de mencionar el debut oficial del primer jugador oriundo Plomer, Carlos Casalla, la recuperación casi total del mayor de los Gáspari, y los regresos de Recaite, Romero y (aunque sea provisorio) Giavino al equipo, todo lo cual nos llena de orgullo.

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